Carta 2: respuesta a carta de Paloma Feressetian

Señor Diego Maradona,

                                       A decir verdad, este mensaje me tomó un poco desprevenido. Ante todo, me alegro de que estes vivo “¡loco!”. Escuché la noticia hace un tiempo y, conociendo tu historia, supuse que ese era el caso. Si bien me parecería interesante conocerte no puedo y no estoy seguro de querer hacerlo. Albergar a falsos muertos es todo un asunto. Primero que todo, en mi casa ya está viviendo George Harrison. Nos conocimos allá por los 90 en un viaje a India. No se si estás al tanto, pero George desde joven, incluso cuando era parte de Los Beatles, practica meditación trascendental. Le ayuda a relajarse, desconectar del mundo y escribir canciones. Yo realizo las mismas prácticas por motivos similares, y desde ese encuentro que somos grandes amigos. Para el 97 le diagnosticaron cáncer de pulmón y garganta, y se salvó de suerte. Él cree que eso fue gracias a la meditación. Así se dio cuenta que no quería vivir para otra cosa que, para el arte y la espiritualidad, alejado de todo y de todos. Olivia vive acá también con él, y sus amigos y familia lo vienen a visitar cada tanto. La fama no era para él. Afortunadamente, cuando se trasladaron George y Olivia aquí su compañía resultó muy enriquecedora. Viven en una casa pequeña al fondo de mi jardín y nos llevamos muy bien.

El problema es entonces que no tengo mucho espacio para hospedarte, y escuché de otras personas que hicieron de hogar de tránsito para otros famosos y no salió nada bien. Sin ofenderte, tenés fama de desordenado e irresponsable. Creo que si venís acá va a ser como cuando lo descubrieron a Michael Jackson y ser armó polémica sobre su muerte. No se con quién estaba parando, pero un amigo me contó que él también estaba vivo, que tras el incidente lo echaron de donde estaba y se tuvo que ir con un familiar.

No quiero ser grosero, pero como dicen en tu país “hazte la fama y échate a dormir”. Lo lamento Diego, a mi casa no podés venir. Además de irresponsable, nunca fuiste muy reservado tampoco, temo que te pases de copas y salgas por el barrio gritando lo de George. Igualmente te deseo mucha suerte.

Saludos, David